Mehdi Karroubi: el "jeque de las reformas"
Por Raphaelle Elkrief para Guysen International News
A sus 72 años de edad, Mehdi Karroubi es el segundo outsider de la campaña presidencial iraní, junto con Mohsen Rezai. En el campo de los reformadores, este religioso de nivel medio anunció su candidatura: "Seré moderado. Seguiré una vía media". Líder del partido "Etemad a Mel" (la Confianza Nacional), este hombre del clero musulmán no es un principiante en la escena política, puesto que fue Presidente del Parlamento iraní en dos ocasiones, y candidato en las elecciones presidenciales de 2005. A raíz de su derrota, había acusado a las autoridades de manipulación, dimitió de sus funciones y fue castigado por haber publicado una carta abierta muy crítica contra el vencedor de las elecciones. Sin sorpresa, pidió este año unas elecciones libres, sin la intervención de los Guardianes de la Revolución… "estamos preparados para la derrota o para el triunfo pero según lo que decida el pueblo", declaró. El candidato a las elecciones hace críticas frecuentes, aunque tímidas, hacia el actual Presidente. Le acusa por su discurso negacionista sobre la Shoá. Según sus observaciones, "la Shoá es un acontecimiento real. De verdad existió". Para Mehdi Karroubi, las posiciones negacionistas de Mahmud Ahmadinejad contribuyeron al aislamiento diplomático del país: "Ahmadinejad hizo el mayor favor a Israel mencionando el Holocausto ya que ahora el mundo apoya a Israel". Mehdi Karroubi cree que el actual Gobierno es "incapaz e inadaptado" y no duda en denunciar las mentiras de Mahmud Ahmadinejad, en particular, por lo que se refiere a las cifras de la economía: "la inflación es mayor de lo que se ha dicho y el desempleo aumentó". Acusa también al Presidente de haber dilapidado el dinero del petróleo, una fuente de ingresos esencial para la economía del país. "Ese tipo de decisión, tomada por un sólo hombre, esa forma de distribuir el dinero, y servirse de cantidades sustanciales de los fondos de reservas en divisas, y el despido de personalidades de calidad, son cosas que no seguiré haciendo" dijo Mehdi Karroubi, queriendo desmarcarse de su adversario. El candidato prometió nacionalizar los beneficios del petróleo, y transferir una parte de sus beneficios a todos los iraníes mayores de 18 años… Una cantidad que ascendería a 50 euros, aproximadamente, por persona.Esta medida populista se inscribe perfectamente en el discurso del candidato. En sus cuatro declaraciones electorales, hizo hincapié en su voluntad de proteger los derechos humanos y la vida privada de los iraníes, establecer reformas en el ámbito de las libertades, y garantizar el derecho, como valor fundamental. Aunque para un "reformador" la lista de las reformas previstas sigue siendo escasa. La única mencionada claramente es la que consistiría en dejar de poner un término a las milicias encargadas de controlar a las mujeres que deben respetar el código de indumentaria ("hajeb", velo o fular islámico y prendas de vestir amplias). Deseoso de hacer respetar el derecho de las mujeres, ya tiene el apoyo de la suya. Fatemeh Karroubi quiere más derechos para las mujeres iraníes, y milita en una asociación que lucha contra la poligamia en Irán. He aquí un activo importante para el candidato. Si puede asegurarse el apoyo de los religiosos, la hipotética "first lady" puede convencer al electorado femenino, en un país cuyo órganismo político principal, el Consejo de los Guardianes, no aprobó a ninguna de las 42 mujeres que deseaban ser candidatas en la elección presidencial. Aquel que quiere ser un "reformador dogmático", es decir, operar reformas en el marco de la ley islámica, propone la apertura del diálogo diplomático para servir a los intereses del país. Después de la elección del Presidente Obama en Estados Unidos, calificó este cambio como "positivo": "Se dio un paso importante. Haré lo mismo en el marco de esta relación, de acuerdo con el interés y el honor nacional. Estamos dispuestos a solucionar completamente nuestros problemas con Estados Unidos". Sin embargo sobre el expediente nuclear no hay cambios con respecto a su adversario Ahmadinejad: defiende el derecho de Irán a obtener la energía nuclear civil: "no vamos a detener el programa nuclear", destacó. Quitándose responsabilidad declara por ejemplo que el expediente nuclear depende del guía supremo", el ayatolah Ali Jamenei
