
Google: ¿amigo de Israel?
Días atrás el co-fundador del buscador de internet Google Serguey Brin afirmó al diario económico The Marker que actualmente conversa con la empresa local Ormat sobre posibles proyectos conjuntos en el campo del desarrollo de fuentes alternativas de energía. Brin, que estuvo en Israel para participar de la conferencia "Afrontando el Mañana", organizada por el presidente Shimón Peres, visitó la sede de Google en Haifa y participó de numerosas conferencias con representantes de la empresa Ormat. Brin también alabó a muchas empresas israelíes en el área de la energía y dijo que evalúan comprar alguna de ellas en el próximo año. Hasta aquí, el magnate es amigo. Pero… La última versión del popular Google Eearth, programa que combina mapas y fotografías digitales de la superficie del planeta, ha mejorado considerablemente la resolución de sus imágenes de Israel. A diferencia del pasado, las áreas militares y otras instalaciones importantes para la defensa del país ya no aparecen difuminadas ni con fotografías de baja definición. Por razones de seguridad y en base a acuerdos que Israel mantiene con proveedores estadounidenses de imágenes de satélite, las tomas de la superficie del país no pueden superar una resolución de dos metros de terreno por pixel de pantalla. Pero… En los nuevos mapas aparecen, por ejemplo, en detalle varias bases aéreas israelíes, en cuyas imágenes los usuarios han llegado a introducir fotografías y anotaciones sobre los aviones o helicópteros utilizados en las instalaciones. ¿En qué quedamos? ¿Google sabe lo que le conviene a Israel? ¿Energía por seguridad? Cuando Googlelandia declare su independencia, lo sabremos. Buena semana.
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Varón y Mujer: Ejemplo sexual sobre la corrupción en Israel
Por Yeoshúa Sobol para Israel Hayom
La falocracia es la autoridad de los hombres sobre las mujeres. Una sociedad falócrata es una sociedad dominada por los hombres. La cultura falócrata confiere a Dios la identidad masculina, y de la imagen de Dios como hombre, se perfila una adoración por el falo y hacia toda cualidad fálica. El monoteísmo es básicamente religiosidad fálica: en su centro se encuentra el Dios único, y no la Diosa única.
En la obra “Monólogos desde la vagina” oímos extensamente, con profundidad y libertad desbordante, acerca de las magníficas cualidades de la vulva de la mujer, pero hasta el presente el teatro enmudece cuando se trata del hombre. Por lo visto no queda mucho por decir sobre el falo, sólo algunas frases jactanciosas acerca de la grandeza y la fuerza y su rigidez, porque lo que resta de todo su esplendor y magnificencia después de la cópula, es preferible callarlo. La falocracia y su moral
Dado que entramos aquí en terreno virgen, nos arriesgaremos a posibles errores, pero considero que en base a los acontecimientos de las últimas semanas, llegó el momento de decir algunas palabras sobre la lógica del falo y acerca de la moral falócrata que surge del mismo. Por lo menos en dos idiomas, ora en hebreo, ora en idish. Existe un aforismo que estipula que cuando el falo se eleva, la lógica se arrastra. Este aforismo preconiza que la lógica fálica desconoce conceptos de lo cierto e incierto, y tampoco de la verdad y la mentira. Desde el punto de vista fálico todo está justificado para permitir al falo el máximo de rendimiento, o en una palabra: maxifálico.
En el camino del falo hacia el objetivo, la ética fálica permite todo al falócrata. Está permitido asegurar el cielo, es posible conquistar corazones con dinero, se permite sobornar y codiciar. Y luego de consumada la acción, está permitido olvidar y comportarse como un puerco.
La lírica hebrea se favoreció con algunas obras falocráticas, que también las mujeres se apasionan por ellas, vergonzosamente. Uno de esos poemas es la conocida “Confesión” de Alexander Penn.
En dicho poema, el hombre se comporta como el prototipo de un falócrata grosero, teniendo la certeza de que la mujer golpeada, a la que dejó detrás de él, suplica para que regrese y se comporte exactamente de igual manera, y que vuelva a una segunda cadencia. No sólo que el falócrata no demuestra arrepentimiento por su comportamiento despreciable, él considera que merece amor por el acto llevado a cabo.
En una sociedad falócrata, la mayoría se siente atraída hacia imágenes de líderes que irradian lógica y moral maxifálica.
El rey David es el ejemplo del falócrata total. Como asimismo Salomón. Es conveniente releer con atención el Cantar de los Cantares para comprobar que fue de la mujer putrefacta por los sufrimientos de amor, después que su dueño le hace un favor y ordena su lecho. “Te busqué y no te encontré, te llamé – y no hallé respuesta”. ¿Acaso no parecería la forma de actuar de los políticos falócratas hacia el rebaño de seguidores ignorantes, incluyendo sus mejores amigos que le rinden pleitesía?
La relación entre mentalidad y moral falócrata y la corrupción, es casi comprensible. Una cultura que permite al hombre tomar cuatro mujeres pero prohíbe a la mujer tomar al mismo tiempo cuatro hombres, avala la mentira de las relaciones entre hombres y mujeres. Nosotros no vivimos en esa cultura, pero no estamos lejos de ella, porque ¿qué es una cultura que santifica maximizar las ganancias, sino una cultura que permite a un hombre perjudicar a mil empleados, y cuanto más fuerte y a cuantas más personas, así es considerado héroe social, y además héroe cultural, a quien los medios reconocidos buscan entrevistar y escuchar de sus labios palabras pletóricas de sabiduría?
Todos los inculpados por corrupción en las últimas décadas fueron hombres falócratas. No recuerdo ningún caso de mujer con poder, que tomó dinero público. Quizás ha llegado el momento de sacudirnos de encima a los falócratas, y reemplazarlos por mujeres. Si llegara el caso, Dios no lo permita, y la vaginocracia fuera menos pura y buena que la falocracia, nos veremos en la obligación de admitir que la fuerza es la fuente de la corrupción. Entretanto es conveniente intentar. En la actual situación no hay lo qué perder.
Fuente: Argentina.co.il - Traducido por Lea Dassa
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Marcos Aguinis en Tel Aviv… y mirando otro canal
Por Daniel Kupervaser
En el acto conmemorativo de los 60 años de independencia de Israel organizado por la Asociación de Amigos de la Universidad de Tel Aviv en Argentina, disertó el escritor argentino Marcos Aguinis.
La conferencia se tituló "El orgullo de ser judío" y se llevó a cabo el 15 de mayo pasado en el moderno auditorio Smolarz de la Universidad de Tel Aviv. Pero Aguinis estaba mirando otro canal o le contaron una historia que ya pareciera no ser.
El auditorio estuvo colmado con la presencia de más de mil personas, inclusive casi todo el cuerpo diplomático de todos los países de Iberoamérica, representantes de la cancillería de Israel y altas autoridades de la Universidad. El comienzo de la disertación incluyó un elemento sorprendente cuando Aguinis hizo referencia a un artículo que circula últimamente en muchos sitios de Internet bajo su firma y titulado "Adoro ser judío". En forma categórica anunció que se trata de un texto apócrifo y desconoce su origen. Los rasgos que enorgullecen al pueblo judío los detalló concisamente en cinco grupos: 1- Tras una continúa historia envuelta en tragedias y creatividades, en amarguras y dulzuras, el pueblo judío adopta una obsesión por la cultura. Crea la tradición de la enseñanza, la lectura de la Torá y se convierte en el primer pueblo que no es analfabeto. 2-La creación de la religión monoteísta, en donde la relación entre el hombre y su dios se basa en derechos y deberes. Las mitzvot como obligaciones religiosas y derechos como la libertad individual o la solidaridad y protección del débil. 3-Siendo un pueblo tan pequeño, logró crear y ofrecer a la humanidad muchos paradigmas entre los cuales citó conceptos escritos en la Biblia como la envidia, el egoísmo y hasta el amor, como surge del Cantar de los Cantares. Tampoco se debe olvidar los razonamientos de Maimónides. 4-A pesar de las tragedias que el pueblo sufre en su historia, sólo cultivó la memoria y se alejó de la venganza. El pueblo judío llora sus pesares, no olvida a sus víctimas pero no cultiva la venganza. Se habla de justicia, del perdón 5-El Estado de Israel es el emprendimiento colectivo más impresionante de la historia moderna. Ya fuera del auditorio y en camino de regreso, mis pensamientos me llevaron a preguntarme: ¿Por qué siendo judío y viviendo en Israel no me siento tan orgulloso? ¿Asistí a una disertación de la actualidad del pueblo judío o sobre la historia de un período que finalizó hace 20 años? ¿Aguinis se refirió solo al pueblo judío de la diáspora o también al pueblo judío que vive en Israel? ¿Los últimos años Israel están dirigidos por judíos o por otro grupo étnico? ¿De qué país habla?
Pareciera que Marcos Aguinis no se fijó lo suficiente en los procesos sociales que se suceden los últimos años en Israel. Habrá prestado atención a que los logros que hoy se perfilan en las instituciones de investigación y en las empresas modernas son el resultado de un sistema educativo que ya hace tiempo cambió radicalmente y no existe más. Que la educación en Israel, según opinión de la mayoría de los expertos, está en un claro proceso de privatización, desprendimiento de valores básicos y, finalmente, en un desmoronamiento total.
¿Se habrá enterado Marcos Aguinis que en los últimos exámenes PISA (Programa Internacional de Evaluación de Estudiantes, que pertenece a la OECD) Israel retrocedió al puesto 39 – 40 entre 55 países que participaron? ¿Por qué Aguinis nos habla de solidaridad y protección del débil cuando Israel logró en pocos años trepar a índices de pobreza que caracterizan a los países subdesarrollados? ¿Aguinis habrá escuchado la última declaración del Ministro de Bienestar social que reconoce que los niveles de pobreza son enormes y que el gobierno no puede hacer nada y todo queda en manos de unos pocos voluntarios? ¿Se enteró Aguinis que hay judíos sobrevivientes de la Shoá castigados porque el dinero de la indemnización alemana destinado a ellos queda o quedó en manos del gobierno? Da la impresión que Aguinis no lee los diarios ni escucha informaciones sobre Israel. En la confrontación con los palestinos prácticamente lo único que se escucha es "respuesta dolorosa", "venganza", “borrar aldeas del mapa". De qué concepto de justicia puedo sentirme orgulloso después que el Fiscal del Estado decidió que no se encontraron pruebas individuales para culpar a policías que asesinaron a 12 manifestantes árabes ciudadanos de Israel a balazos de francotiradores (comprobado por la comisión de investigación oficial) por el mero hecho de participar en una manifestación violenta. Claro, la misma violencia por parte de judíos que se oponían a la desconexión recibió un trato de guantes de seda.
Es de suponer que Aguinis no se podría imaginar lo que algunos de nosotros lo preveíamos y que finalmente ocurrió tan solo un par de días después del acto. En Israel, en la ciudad de Or Yehuda el viceintendente quemó en una fogata pública ejemplares del Nuevo Testamento. Será que los judíos en Israel se olvidaron en unos pocos años aquello que "donde se queman libros se quemaran seres humanos". Yo me puedo sentir realmente orgulloso de ser judío el día que toda la disertación de Aguinis sea verdad y se aplique en Israel. No por ahora.
Fuente: Nueva Sión y Argentina.co.il
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Entre el futuro y la nostalgia del Shtetl
Por Iftaj Treguerman
En un cuarto se encuentran un ministro chino, un presidente estadounidense, un filosofo francés y un medico judío... No, no es el comienzo de un chiste. Es lo que sucedió esta semana, repetido en miles de variaciones y en sin fin de versiones en el Centro de Convenciones de Jerusalén.
En estos días Jerusalén se ha convertido en el centro intelectual y político del mundo.
En esta pequeña ciudad capital de un país diminuto se dieron cita decenas de jefes de Estado, entre ellos de los más ricos e importantes del mundo, junto con los capitanes de las más destacadas empresas del planeta, cuyo ciclo económico anual es mayor que el producto bruto de la mayoría de los países, junto con premios Nóbel, rectores de universidades, filósofos y lo más granado de la intelectualidad mundial.
Si los Juegos Olímpicos de China reunirán a la elite del deporte mundial, la "olimpiada de Jerusalén" reunió a la cúspide intelectual del orbe.
Los invitados estuvieron con tres motivos declarados:
1- Rendir homenaje al Estado Judío en sus 60 años de logros.
2- Hablar del futuro del pueblo judío y del planeta.
3- Homenajear a Shimón Peres, presidente de Israel, decano de los estadistas del mundo y el líder de mayor estatura y prestigio capaz de convocar a la elite internacional para debatir el futuro.
Sí, el tema fue el futuro. Esa es la pasión del adolescente de 84 años, el presidente Shimón Peres, optimista sin remedio, inquieto, curioso y con un dinamismo incansable. Aún cuando somos muchos los que podemos tener objeciones críticas en cuanto al comportamiento político de Peres, nadie puede permanecer indiferente ante la energía, la visión de futuro y la capacidad de concretar quimeras que tiene ese niño eterno.
En la convención se presentaron los más ambiciosos planes de las empresas de punta, de las tecnologías más futuristas y de los sistemas que pueden combatir el hambre, aprovechar la energía solar, agilizar las comunicaciones, conservar el equilibrio ecológico.
El tema es el futuro. Desde una capital pequeña de un país diminuto en sus 60 primeras primaveras.
Cierto es que hubieron otros países que se constituyeron paralelamente al Estado de Israel. Dónde están ellos y dónde nosotros. Israel, en estado permanente de alerta, no dejó un solo día de ser democrática, de funcionar su sistema judicial, de abrir sus puertas (caso único en el mundo occidental ) a la inmigración casi irrestricta, una economía pujante, ni de crear cultura en un idioma considerado lengua muerta.
No, nadie cree ni intenta presentarla como perfecta. Pero trabaja y crea su futuro.
Nostalgias del Shtetl
Mientras tanto, en la otra punta del globo, en nuestra querida comunidad judía de la Argentina, pareciera ser que se despertaron nostalgias del shtetl, de la pequeña aldehuela judía de Europa Oriental, cerrada y enquistada en reminiscencias de un mundo que ya no existe.
La comunidad que supo ser pionera en el mundo judío por su red escolar, por su solidaridad, por los intelectuales que aportó a su pueblo y a la humanidad, por su calidez sionista... permite que las últimas elecciones en la AMIA sean copadas por los nostálgicos de ayer, por los que no entienden que las fronteras del judaísmo las marcan las judíos y que la historia es dinámica y debe marchar hacia adelante.
¿El triunfo de la formación no-sionista, ortodoxa intransigente, Agudat Israel en la ultima consulta democrática indica que ellos son mayoría en la comunidad judía de Argentina? No. Indica que existe una angustiante carencia de liderazgo. Que la mayoría laica y abierta no tuvo suficiente voz y voto porque los líderes no supieron convocarla. Por rencillas intestinas, por falta de carisma, por estar encerrados en sus despachos y no conocer ni consultar al judío de todos los días, que trabaja, que se identifica con Israel y que desea continuar perteneciendo.
La situación en la comunidad argentina está planteada: Los que apuestan al futuro y a la continuidad del judaísmo dinámico y creativo sin olvidar el pasado, frente a los que cierran puertas y sienten nostalgias del shtetl.
La pregunta vital es: ¿Habrán líderes que sepan convocar a la mayoría silenciosa y sobreponerse a la parálisis y al bochorno?
Fuente: Argentina.co.il
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Así no se construye la paz
En tiempos normales, el anuncio oficial de conversaciones con Siria debiera ser netamente una buena noticia. Pero con un primer ministro sospechoso de ilícitos, y cuando el anuncio coincide con el levantamiento del secreto de sumario en su caso, estos no son, precisamente, tiempos normales.
Por Jemi Shalev - Israel Hayom
La paz con Siria es de una importancia suprema para Israel, aun al precio de una retirada completa de los Altos del Golán. Así lo piensan los jefes del sistema de seguridad, que presionan hace largos meses para que se dé un serio paso político hacia Damasco. En tiempos normales, por ende, un anuncio oficial del Despacho del Primer Ministro sobre la apertura del diálogo entre ambos países debiera ser una buena noticia neto, y una razón de optimismo para todos los que creen en las posibilidades de un acuerdo.
Pero los tiempos, lamentablemente, no son normales: no lo pueden ser si el primer ministro es "claramente sospechoso", ni tampoco si el anuncio de su Despacho es programado, oh casualidad, para el momento en que se levanta el secreto de sumario respecto de su caso. En lugar de enfrentar el dilema existencial desgarrador, que define el destino entre la importancia de los Altos del Golán y la vitalidad de la paz, los ciudadanos del país deben preguntarse, no sin razón, si su primer ministro no está efectuando una colosal manipulación de la opinión pública, si no está buscando refugio político de las investigaciones policiales y de la Fiscalía.
Pues aun con un primer ministro honesto sería difícil obtener el apoyo público a un acuerdo con Siria, pues para la mayoría de la población, la devolución del Golán es más difícil que la separación de las aguas del Mar Rojo. A esta dificultad se le suma ahora una preciosa arma en manos de todos aquellos que se oponen a la retirada en cualquier manera, que sostienen -con hipocresía no fundamentada- que el primer ministro no tiene autoridad moral para sus medidas. Así se genera la opinión, en la mayoría de la opinión pública, de que se trata de una medida de manipulación cínica, en la que la profundidad de la retirada será, en este caso, como el grosor de los famosos sobres con dinero en efectivo.
El principal "consuelo" es que, según todas las señales, el acuerdo de paz con Siria no está a la vuelta de la esquina, y según el ritmo de la investigación en su contra, no será Olmert el que encabece la campaña, si llega el caso, por su aprobación.
Si bien los norteamericanos retiraron últimamente su oposición a la mera existencia de conversaciones entre Israel y Siria, no tienen ninguna intención de intervenir con un alto perfil en ellas y, a falta de tal intervención, creen los expertos, se trata de una máxima aceleración en punto muerto.
Por ahora, también los sirios pueden gozar de sus propios titulares, que les permiten "equilibrar" el logro del copamiento de Hezballah en el Líbano con un show de supuesta moderación política, gentileza de un desesperado Olmert. He aquí una primera coincidencia entre las partes: uno busca tomar distancia del "eje del mal", el otro busca refugio de quienes "investigan el mal".
Perdón, pero así no se construye el apoyo a un acuerdo de paz. Hay que darle chance a la paz, por supuesto, pero no se la puede desperdiciar en lo que se puede interpretar, con razón o incluso sin ella, como un truco barato y torpe. Parafraseando a Georges Clemenceau, la paz es algo demasiado importante como para dejarlo en manos de un primer ministro cuyo futuro, según las estimaciones de la Policía y la Fiscalía, ha quedado bien atrás.