Mir Hossein Mousavi: ¿la nueva cara de Irán?
Por Esther Stefanelli para Guysen International News
Cuando uno se fija en la entrevista del diario alemán Spiegel con el Presidente Ahmadinejad de mediados de abril, se podía observar, a la par, la respuesta de su principal rival, Mir Hossein Mousavi. Midiendo bien sus palabras y criticando muy prudentemente al actual Gobierno, evalúa sus oportunidades de vencer al Presidente en junio, y habla de las ilusiones occidentales sobre la política nuclear iraní.
Nacido en el suroeste iraní, Mousavi se considera un intelectual, miembro del movimiento de resistencia durante el régimen del antiguo Sha Mohammad Reza Pahlavi. Después de que el Sha fuese derrocado en 1979, Mousavi se convirtió en Ministro de Asuntos Exteriores, luego en Primer Ministro de esta nueva teocracia. Durante la guerra irano-iraquí, se impuso como un organizador competente de la economía de guerra. Sin embargo no ocupa ese puesto desde 1989. H. Mousavi es el líder de una corriente “reformada y pragmática” y se considera como el único opositor que tiene oportunidades de ganarle al actual mandatario. Pero el rival hace frente a grandes dificultades en su campaña: a pesar de un verdadero descontento en las ciudades, que proviene de la mala gestión económica del actual Presidente, las zonas rurales se mantienen mayoritariamente a favor de Ahmadinejad. La única oportunidad de H. Mousavi provendría de su capacidad para convencer a los jóvenes y a la clase media para votarle en las urnas el próximo 12 de junio. Sin embargo, sigue siendo bastante desconocido de este lado de la población que representa las 2/3 partes.Explica su vuelta a la política, después de 20 años, por su deseo de restablecer los desajustes del país: “Creo que puedo mejorar las cosas. Quiero suprimir la corrupción”.H. Mousavi cuenta con el cambio de Gobierno para hacer cambiar las políticas. Propone “mejorar la situación económica, combatir la inflación, crear empleos… ”.Por lo que se refiere a las relaciones irano-americanas, H. Mousavi reconoce que el lenguaje del nuevo Presidente americano difiere en todo del de su antecesor. “Si sus actos corresponden con sus declaraciones, ¿por qué no negociar?”. Cree que los americanos tienen el deber “de hacer avances concretos”, pero quiere contribuir “moderando nuestro tono”. “Estoy a favor de las buenas relaciones con los otros países. Una política de distensión es una cuestión central a mi modo de ver”, declaró. Preguntado sobre la cuestión nuclear, hace hincapié en la transparencia de la política de su país en este ámbito: “Abrimos nuestras instalaciones a los inspectores de las Naciones Unidas”. Sin embargo, opina que Irán tiene derecho a enriquecer uranio: “No abandonaremos los éxitos de nuestros científicos. No suspenderé tampoco el enriquecimiento de uranio”. Pero, más moderado, quiere “evitar tensiones inútiles”.Por lo que se refiere a las relaciones con Europa, recuerda que “[nosotros] siempre hemos tenido buenas relaciones con Europa. Oriente Medio es su vecino, y somos un gran protagonista de la región”.Como consecuencia de las reacciones a raíz de las declaraciones antisemitas del Presidente iraní, hay mucho interés por conocer las posiciones de H. Mousavi con respecto a Israel y el Holocausto. Reconoce que “algo ha debido pasar”. “No es una cuestión de número, o de quien cometió los crímenes”, añadió, “cualquiera que sea el responsable nosotros lo condenamos”. Sin embargo, hace rápidamente la analogía con los acontecimientos en Israel: “¿Por qué los Palestinos deberían pagar por lo que pasó en Europa?”.Sobre su política con Israel, anuncia sin rodeos no reconocer al estado judío. Hace un llamamiento a un referéndum de los Palestinos, que conduciría a la autodeterminación.Por último expresándose sobre sus oportunidades de ganar las elecciones, H. Mousavi “intenta ver las cosas de manera optimista”. Ante la enorme máquina de propaganda establecida por el actual Presidente, que recibe apoyos como el del líder religioso Ali Jamenei, intenta tranquilizar: “Cuanto más unidos estemos sobre las cuestiones políticas centrales, mejor será el futuro de nuestro país” concluyó.
Por Esther Stefanelli para Guysen International News
Cuando uno se fija en la entrevista del diario alemán Spiegel con el Presidente Ahmadinejad de mediados de abril, se podía observar, a la par, la respuesta de su principal rival, Mir Hossein Mousavi. Midiendo bien sus palabras y criticando muy prudentemente al actual Gobierno, evalúa sus oportunidades de vencer al Presidente en junio, y habla de las ilusiones occidentales sobre la política nuclear iraní.
Nacido en el suroeste iraní, Mousavi se considera un intelectual, miembro del movimiento de resistencia durante el régimen del antiguo Sha Mohammad Reza Pahlavi. Después de que el Sha fuese derrocado en 1979, Mousavi se convirtió en Ministro de Asuntos Exteriores, luego en Primer Ministro de esta nueva teocracia. Durante la guerra irano-iraquí, se impuso como un organizador competente de la economía de guerra. Sin embargo no ocupa ese puesto desde 1989. H. Mousavi es el líder de una corriente “reformada y pragmática” y se considera como el único opositor que tiene oportunidades de ganarle al actual mandatario. Pero el rival hace frente a grandes dificultades en su campaña: a pesar de un verdadero descontento en las ciudades, que proviene de la mala gestión económica del actual Presidente, las zonas rurales se mantienen mayoritariamente a favor de Ahmadinejad. La única oportunidad de H. Mousavi provendría de su capacidad para convencer a los jóvenes y a la clase media para votarle en las urnas el próximo 12 de junio. Sin embargo, sigue siendo bastante desconocido de este lado de la población que representa las 2/3 partes.Explica su vuelta a la política, después de 20 años, por su deseo de restablecer los desajustes del país: “Creo que puedo mejorar las cosas. Quiero suprimir la corrupción”.H. Mousavi cuenta con el cambio de Gobierno para hacer cambiar las políticas. Propone “mejorar la situación económica, combatir la inflación, crear empleos… ”.Por lo que se refiere a las relaciones irano-americanas, H. Mousavi reconoce que el lenguaje del nuevo Presidente americano difiere en todo del de su antecesor. “Si sus actos corresponden con sus declaraciones, ¿por qué no negociar?”. Cree que los americanos tienen el deber “de hacer avances concretos”, pero quiere contribuir “moderando nuestro tono”. “Estoy a favor de las buenas relaciones con los otros países. Una política de distensión es una cuestión central a mi modo de ver”, declaró. Preguntado sobre la cuestión nuclear, hace hincapié en la transparencia de la política de su país en este ámbito: “Abrimos nuestras instalaciones a los inspectores de las Naciones Unidas”. Sin embargo, opina que Irán tiene derecho a enriquecer uranio: “No abandonaremos los éxitos de nuestros científicos. No suspenderé tampoco el enriquecimiento de uranio”. Pero, más moderado, quiere “evitar tensiones inútiles”.Por lo que se refiere a las relaciones con Europa, recuerda que “[nosotros] siempre hemos tenido buenas relaciones con Europa. Oriente Medio es su vecino, y somos un gran protagonista de la región”.Como consecuencia de las reacciones a raíz de las declaraciones antisemitas del Presidente iraní, hay mucho interés por conocer las posiciones de H. Mousavi con respecto a Israel y el Holocausto. Reconoce que “algo ha debido pasar”. “No es una cuestión de número, o de quien cometió los crímenes”, añadió, “cualquiera que sea el responsable nosotros lo condenamos”. Sin embargo, hace rápidamente la analogía con los acontecimientos en Israel: “¿Por qué los Palestinos deberían pagar por lo que pasó en Europa?”.Sobre su política con Israel, anuncia sin rodeos no reconocer al estado judío. Hace un llamamiento a un referéndum de los Palestinos, que conduciría a la autodeterminación.Por último expresándose sobre sus oportunidades de ganar las elecciones, H. Mousavi “intenta ver las cosas de manera optimista”. Ante la enorme máquina de propaganda establecida por el actual Presidente, que recibe apoyos como el del líder religioso Ali Jamenei, intenta tranquilizar: “Cuanto más unidos estemos sobre las cuestiones políticas centrales, mejor será el futuro de nuestro país” concluyó.
