
La España que hiela el corazón contra Israel
España lidera en Europa, el país más amargamente crítico contra Israel. Lo dijo Antonio Machado, el poeta: "Una de las dos Españas ha de helarte el corazón".
por José I. Rodríguez
Las consecuencias de esta crítica desproporcionada ya se están dejando sentir en muchos aspectos. Sigue habiendo las dos Españas, la que hiela el corazón y la que mira para otro lado para no ver la realidad. Lejos de conseguir la ansiada unidad de España, parece que cada día se divide en más de una. Los nacionalismos excluyentes están campando por sus respetos y el terrorismo, se hace fuerte teniendo una base social, que justifica todos sus crímenes. La crítica que España hace a Israel, es la misma que recibe de los nacionalistas y sus ambiguas posiciones frente al terrorismo doméstico, que no domesticado, el cual alardea de ser amigo de los islamistas. Sigue habiendo dos Españas, la que hiela el corazón y la de los que ya tienen el corazón helado, insensible y duro por su odio a Israel. España es el país líder en la Comunidad Económica Europea, en paro y en destrucción de empleo. Seguimos siendo líderes en consumo de cocaína y demás estupefacientes. La autodenominada octava potencia industrial del mundo, está basada en una economía especulativa, donde los bancos, las constructoras y las inmobiliarias, solo han generado por su insaciable codicia, la mayor crisis en la historia moderna de España. Como una gran paradoja el país líder en el crecimiento económico europeo hace poco tiempo, es ahora el que más pobres y pobreza genera ¿Será casualidad o causalidad?
Para colmo de males una España que en boca de sus dirigentes, se abroga el derecho de dar lecciones de democracia al mundo entero, pero en particular a Israel. Con una mano firman compromisos de amistad, en el marco de la CEE, para defender a Israel y con la otra pertrecha a Hamás y grupos afines de "todo lo necesario" para continuar en la práctica, la lucha contra Israel y Occidente. Una España que humilla, insulta y desprecia al embajador de Israel, en plena manifestación pública, organizada por el partido gobernante, resto de partidos de izquierdas y asociaciones dependientes económicamente del gobierno. Hiela el corazón que asociaciones humanistas anti judías, reciban eso si legalmente, fondos administrados por el gobierno, para promover tan grotesco circo mediático, que además apedrea sin mayores consecuencias la Embajada de Israel y por tanto a toda la nación que representa. Pensé que estaba en un país islámico cuando se apedreaba la Embajada de Israel y lloré, aunque mis lágrimas se helaron, junto con mi corazón. Insisto hiela el corazón ver las terribles acusaciones contra Israel, que en forma de "sacrílegas pancartas" se exhiben sin pudor en medio de una gran orgia de odio contra Israel.
Con todo respeto, hiela el corazón que el Rey de España, mantenga un título entre los muchos que obstenta, como Rey de Jerusalén, el cual solo le pertenece al D's de Israel. Hiela el corazón ver como en España se recibe a insignes paladines de la "lucha revolucionaria", de un país que nunca existió y que aun no existe en la práctica y a la vez se critica a los dirigentes legítimamente y democráticamente elegidos por el pueblo de Israel. El único país que jamás existió en toda la historia de la humanidad, cuyo nombre no quiero acordarme, tiene representación pseudo-diplomática, en medio mundo y en especial en esta heladora de corazones que es España. España se congela de norte a sur, podría ser un titular del periódico de mañana, de cualquier mañana en este año, pues lo que sembramos será lo que recojamos. La economía de España también será líder en la que será la mayor recesión que se sufrirá en Europa. El enfrentamiento encubierto, con Israel nos pasará factura. Mientras España mantenga una postura ambigua con el terrorismo islámico, y bese las mejillas, impregnadas de caro perfume petrolero de los Países Árabes, y a la vez se enfrente agriamente con Israel, estaremos alejados de la promesa divina de ser bendecidos.
España dice que es amiga de Israel, pero en la cotidiana realidad en la que vivimos, en los medios de contaminación, perdón quise decir comunicación, los organismos oficiales, los partidos políticos, las asociaciones pagadas y paganas, disimulan con sus labios el odio que tienen a todo lo que representa, el judaísmo, los israelíes, los sefardís, los sionistas y los amigos de Israel, en una palabra a Israel. Me arriesgo a dar un consejo, que por no pedido puede ser mal recibido, pero quisiera recordar, de nuevo con todo respeto, lo que dice la Escritura, fuente del verdadero conocimiento, a los gobernantes de Israel. "El que odia, lo disimula con los labios, pero en su interior maquina engaño; por más que hable amigablemente, no le creas, porque siete abominaciones hay en su corazón." (Proverbios 26.24-25). Cuidado Israel de los que dicen con su boca que son tus amigos, son más peligrosos que tus enemigos, aunque de ambos se encargue D's.
España lidera en Europa, el país más amargamente crítico contra Israel. Lo dijo Antonio Machado, el poeta: "Una de las dos Españas ha de helarte el corazón".
por José I. Rodríguez
Las consecuencias de esta crítica desproporcionada ya se están dejando sentir en muchos aspectos. Sigue habiendo las dos Españas, la que hiela el corazón y la que mira para otro lado para no ver la realidad. Lejos de conseguir la ansiada unidad de España, parece que cada día se divide en más de una. Los nacionalismos excluyentes están campando por sus respetos y el terrorismo, se hace fuerte teniendo una base social, que justifica todos sus crímenes. La crítica que España hace a Israel, es la misma que recibe de los nacionalistas y sus ambiguas posiciones frente al terrorismo doméstico, que no domesticado, el cual alardea de ser amigo de los islamistas. Sigue habiendo dos Españas, la que hiela el corazón y la de los que ya tienen el corazón helado, insensible y duro por su odio a Israel. España es el país líder en la Comunidad Económica Europea, en paro y en destrucción de empleo. Seguimos siendo líderes en consumo de cocaína y demás estupefacientes. La autodenominada octava potencia industrial del mundo, está basada en una economía especulativa, donde los bancos, las constructoras y las inmobiliarias, solo han generado por su insaciable codicia, la mayor crisis en la historia moderna de España. Como una gran paradoja el país líder en el crecimiento económico europeo hace poco tiempo, es ahora el que más pobres y pobreza genera ¿Será casualidad o causalidad?
Para colmo de males una España que en boca de sus dirigentes, se abroga el derecho de dar lecciones de democracia al mundo entero, pero en particular a Israel. Con una mano firman compromisos de amistad, en el marco de la CEE, para defender a Israel y con la otra pertrecha a Hamás y grupos afines de "todo lo necesario" para continuar en la práctica, la lucha contra Israel y Occidente. Una España que humilla, insulta y desprecia al embajador de Israel, en plena manifestación pública, organizada por el partido gobernante, resto de partidos de izquierdas y asociaciones dependientes económicamente del gobierno. Hiela el corazón que asociaciones humanistas anti judías, reciban eso si legalmente, fondos administrados por el gobierno, para promover tan grotesco circo mediático, que además apedrea sin mayores consecuencias la Embajada de Israel y por tanto a toda la nación que representa. Pensé que estaba en un país islámico cuando se apedreaba la Embajada de Israel y lloré, aunque mis lágrimas se helaron, junto con mi corazón. Insisto hiela el corazón ver las terribles acusaciones contra Israel, que en forma de "sacrílegas pancartas" se exhiben sin pudor en medio de una gran orgia de odio contra Israel.
Con todo respeto, hiela el corazón que el Rey de España, mantenga un título entre los muchos que obstenta, como Rey de Jerusalén, el cual solo le pertenece al D's de Israel. Hiela el corazón ver como en España se recibe a insignes paladines de la "lucha revolucionaria", de un país que nunca existió y que aun no existe en la práctica y a la vez se critica a los dirigentes legítimamente y democráticamente elegidos por el pueblo de Israel. El único país que jamás existió en toda la historia de la humanidad, cuyo nombre no quiero acordarme, tiene representación pseudo-diplomática, en medio mundo y en especial en esta heladora de corazones que es España. España se congela de norte a sur, podría ser un titular del periódico de mañana, de cualquier mañana en este año, pues lo que sembramos será lo que recojamos. La economía de España también será líder en la que será la mayor recesión que se sufrirá en Europa. El enfrentamiento encubierto, con Israel nos pasará factura. Mientras España mantenga una postura ambigua con el terrorismo islámico, y bese las mejillas, impregnadas de caro perfume petrolero de los Países Árabes, y a la vez se enfrente agriamente con Israel, estaremos alejados de la promesa divina de ser bendecidos.
España dice que es amiga de Israel, pero en la cotidiana realidad en la que vivimos, en los medios de contaminación, perdón quise decir comunicación, los organismos oficiales, los partidos políticos, las asociaciones pagadas y paganas, disimulan con sus labios el odio que tienen a todo lo que representa, el judaísmo, los israelíes, los sefardís, los sionistas y los amigos de Israel, en una palabra a Israel. Me arriesgo a dar un consejo, que por no pedido puede ser mal recibido, pero quisiera recordar, de nuevo con todo respeto, lo que dice la Escritura, fuente del verdadero conocimiento, a los gobernantes de Israel. "El que odia, lo disimula con los labios, pero en su interior maquina engaño; por más que hable amigablemente, no le creas, porque siete abominaciones hay en su corazón." (Proverbios 26.24-25). Cuidado Israel de los que dicen con su boca que son tus amigos, son más peligrosos que tus enemigos, aunque de ambos se encargue D's.