
Grandes discursos de los Ministros israelíes: un jurado escéptico
Por Raphaelle Elkrief para Guysen International News
La lógica es aplastante. Después del discurso del Presidente Obama en El Cairo, aclarando su visión de la paz en la región, el Primer Ministro israelí se expresó este domingo 14 de junio, en un discurso muy esperado, sobre las expectativas y las elecciones de su Gobierno respecto a la situación en Oriente Medio. Esta semana, sus emisarios fueron enviados a Europa como una continuación de este discurso, con el fin de reafirmar y afianzar la conciencia de los Ministros europeos sobre las declaraciones del jefe del Gobierno.
De visita en París, el Ministro de Defensa israelí se congratuló por la reacción “positiva” de Estados Unidos al discurso del Primer Ministro. Su encuentro con el jefe de la diplomacia francesa fue una buena ocasión para mencionar la inevitable cuestión iraní, así como las elecciones del pasado 12 de junio. Con motivo de este encuentro, Ehud Barak concedió también una entrevista al diario “Le Figaro”, centrándose en las cuestiones relacionadas con el conflicto israélo-palestino. A su modo de ver, la paz debe alcanzarse a través de negociaciones de buena fe antes de garantizar que no habrá nuevos asentamientos, haciéndose eco de la declaración de Netanyahu en Bar-Ilan: “No construiremos nuevas localidades en Judea-Samaria”.Sin embargo, a pesar del entusiasmo aparente del Ministro de Defensa, parece que el discurso del Primer Ministro no ha satisfecho del todo a Washington. El Presidente americano reaccionó en persona a las declaraciones, repitiendo de nuevo que Israel debe cesar las construcciones en Judea-Samaria, felicitándose al mismo tiempo de que “el Gobierno (israelí) haya aceptado el principio de un Estado palestino. Algo se ha avanzado con este discurso”. Pero si las palabras de “Estado palestino” satisfacieron a la administración Obama, la cuestión del cese de los asentamientos en Judea-Samaria sigue siendo un punto de discordia entre Jerusalén y Washington. Otro examen para un Ministro israelí: después del de Netanyahu, este domingo fue el turno de su Ministro de Asuntos Exteriores… Avigdor Lieberman; actualmente en Europa; fue invitado por sus homólogos europeos este lunes 15 de junio en Luxemburgo para una reunión organizada cada seis meses. Esta reunión tiene como objetivo hacer balance de los grandes expedientes diplomáticos, y principalmente para tratar la resolución del conflicto israélo-palestino. Avigdor Lieberman sabía a que atenerse. En efecto, durante el fin de semana, el Responsable europeo para la política exterior, Javier Solana, estuvo en Israel y en los territorios palestinos, visita durante la cual recordó con insistencia la solución de dos Estados para dos pueblos. Los jefes de la diplomacia europea reiteraron este deseo. Durante la reunión, Lieberman recordó de nuevo los discursos de Netanyahu, a quien juzgó “muy positivo, pacifista”: “Pensamos que podemos comenzar negociaciones con los Palestinos sin condiciones previas”, añadió, así como con Siria y Arabia Saudíta. La Unión Europea consideró que el discurso de Netanyahu constituía un “paso en la buena dirección”. El Ministro checo de Asuntos Exteriores, Jan Kohout, cuyo país preside la Unión Europea, destacó por su parte que “la aceptación de un Estado Palestino está allí”. Sin embargo, y una vez más, este entusiasmo fue sólo a medias. En efecto, mientras se destacaba que se trataba de “un paso en la buena dirección”, los jefes de la diplomacia europea juzgaron insuficiente el discurso del Primer Ministro israelí. Así, el plan para mejorar las relaciones con el Estado hebreo, anunciado en diciembre de 2008 antes de la guerra en Gaza, será prorrogado o congelado, a la espera de avances más significativos por parte del lado israelí… como el cese de los asentamientos en Judea-Samaria.
Por Raphaelle Elkrief para Guysen International News
La lógica es aplastante. Después del discurso del Presidente Obama en El Cairo, aclarando su visión de la paz en la región, el Primer Ministro israelí se expresó este domingo 14 de junio, en un discurso muy esperado, sobre las expectativas y las elecciones de su Gobierno respecto a la situación en Oriente Medio. Esta semana, sus emisarios fueron enviados a Europa como una continuación de este discurso, con el fin de reafirmar y afianzar la conciencia de los Ministros europeos sobre las declaraciones del jefe del Gobierno.
De visita en París, el Ministro de Defensa israelí se congratuló por la reacción “positiva” de Estados Unidos al discurso del Primer Ministro. Su encuentro con el jefe de la diplomacia francesa fue una buena ocasión para mencionar la inevitable cuestión iraní, así como las elecciones del pasado 12 de junio. Con motivo de este encuentro, Ehud Barak concedió también una entrevista al diario “Le Figaro”, centrándose en las cuestiones relacionadas con el conflicto israélo-palestino. A su modo de ver, la paz debe alcanzarse a través de negociaciones de buena fe antes de garantizar que no habrá nuevos asentamientos, haciéndose eco de la declaración de Netanyahu en Bar-Ilan: “No construiremos nuevas localidades en Judea-Samaria”.Sin embargo, a pesar del entusiasmo aparente del Ministro de Defensa, parece que el discurso del Primer Ministro no ha satisfecho del todo a Washington. El Presidente americano reaccionó en persona a las declaraciones, repitiendo de nuevo que Israel debe cesar las construcciones en Judea-Samaria, felicitándose al mismo tiempo de que “el Gobierno (israelí) haya aceptado el principio de un Estado palestino. Algo se ha avanzado con este discurso”. Pero si las palabras de “Estado palestino” satisfacieron a la administración Obama, la cuestión del cese de los asentamientos en Judea-Samaria sigue siendo un punto de discordia entre Jerusalén y Washington. Otro examen para un Ministro israelí: después del de Netanyahu, este domingo fue el turno de su Ministro de Asuntos Exteriores… Avigdor Lieberman; actualmente en Europa; fue invitado por sus homólogos europeos este lunes 15 de junio en Luxemburgo para una reunión organizada cada seis meses. Esta reunión tiene como objetivo hacer balance de los grandes expedientes diplomáticos, y principalmente para tratar la resolución del conflicto israélo-palestino. Avigdor Lieberman sabía a que atenerse. En efecto, durante el fin de semana, el Responsable europeo para la política exterior, Javier Solana, estuvo en Israel y en los territorios palestinos, visita durante la cual recordó con insistencia la solución de dos Estados para dos pueblos. Los jefes de la diplomacia europea reiteraron este deseo. Durante la reunión, Lieberman recordó de nuevo los discursos de Netanyahu, a quien juzgó “muy positivo, pacifista”: “Pensamos que podemos comenzar negociaciones con los Palestinos sin condiciones previas”, añadió, así como con Siria y Arabia Saudíta. La Unión Europea consideró que el discurso de Netanyahu constituía un “paso en la buena dirección”. El Ministro checo de Asuntos Exteriores, Jan Kohout, cuyo país preside la Unión Europea, destacó por su parte que “la aceptación de un Estado Palestino está allí”. Sin embargo, y una vez más, este entusiasmo fue sólo a medias. En efecto, mientras se destacaba que se trataba de “un paso en la buena dirección”, los jefes de la diplomacia europea juzgaron insuficiente el discurso del Primer Ministro israelí. Así, el plan para mejorar las relaciones con el Estado hebreo, anunciado en diciembre de 2008 antes de la guerra en Gaza, será prorrogado o congelado, a la espera de avances más significativos por parte del lado israelí… como el cese de los asentamientos en Judea-Samaria.