MUSEO DE LA TORRE DE DAVID
La Ciudadela, denominada "Torre de David", domina la Ciudad Vieja desde el punto más elevado de la zona. Ya desde el siglo II a. C. defendió a Jerusalén contra invasores que vinieran del norte y del oeste (los puntos estratégicos débiles de la ciudad). Todos los sucesivos gobernantes de la ciudad se preocuparon de fortificarla y reconstruirla.
Al final de la Primera Guerra Mundial, cuando los turcos abandonaron Jerusalén, la Ciudadela no era más que un montón de escombros. Los británicos iniciaron un proyecto de reconstrucción, una de cuyas metas fue la reconstrucción de la Ciudadela, que fue transformada en sitio histórico y centro cultural para los habitantes de Jerusalén.
En 1967 se resolvió establecer un Museo de la Ciudad de Jerusalén en la Ciudadela. Después de muchos años y una meticulosa restauración y reconstrucción, el Museo se abrió al público en 1983. Actualmente la Ciudadela es un centro cultural y educativo, donde los visitantes pueden aprender y vivenciar la apasionante historia de Jerusalén.
La visita al museo se compone de tres itinerarios temáticos: un recorrido cronológico por la historia de la ciudad, dentro de las salas de exposición; un itinerario de observación desde las torres de la Ciudadela; y un itinerario arqueológico que recorre las excavaciones del Parque Arqueológico, donde se pueden ver hallazgos del periodo asmoneo hasta el otomano.
Se puede iniciar la visita viendo una película de 14 minutos, realizada por el italiano Emanuel Luzzatti, que se proyecta en la Torre de Fasael. Junto al portón de salida, en el interior de un antiguo pozo de agua, hay una maqueta de Jerusalén, única en su género, que fue preparada por el artista húngaro Stefan Ilisch especialmente para la Exposición Internacional de Viena de 1872.
Desde la sala de proyección el itinerario conduce a una exposición histórica que comienza con la fundación de Jerusalén
La Ciudadela, denominada "Torre de David", domina la Ciudad Vieja desde el punto más elevado de la zona. Ya desde el siglo II a. C. defendió a Jerusalén contra invasores que vinieran del norte y del oeste (los puntos estratégicos débiles de la ciudad). Todos los sucesivos gobernantes de la ciudad se preocuparon de fortificarla y reconstruirla.
Al final de la Primera Guerra Mundial, cuando los turcos abandonaron Jerusalén, la Ciudadela no era más que un montón de escombros. Los británicos iniciaron un proyecto de reconstrucción, una de cuyas metas fue la reconstrucción de la Ciudadela, que fue transformada en sitio histórico y centro cultural para los habitantes de Jerusalén.
En 1967 se resolvió establecer un Museo de la Ciudad de Jerusalén en la Ciudadela. Después de muchos años y una meticulosa restauración y reconstrucción, el Museo se abrió al público en 1983. Actualmente la Ciudadela es un centro cultural y educativo, donde los visitantes pueden aprender y vivenciar la apasionante historia de Jerusalén.
La visita al museo se compone de tres itinerarios temáticos: un recorrido cronológico por la historia de la ciudad, dentro de las salas de exposición; un itinerario de observación desde las torres de la Ciudadela; y un itinerario arqueológico que recorre las excavaciones del Parque Arqueológico, donde se pueden ver hallazgos del periodo asmoneo hasta el otomano.
Se puede iniciar la visita viendo una película de 14 minutos, realizada por el italiano Emanuel Luzzatti, que se proyecta en la Torre de Fasael. Junto al portón de salida, en el interior de un antiguo pozo de agua, hay una maqueta de Jerusalén, única en su género, que fue preparada por el artista húngaro Stefan Ilisch especialmente para la Exposición Internacional de Viena de 1872.
Desde la sala de proyección el itinerario conduce a una exposición histórica que comienza con la fundación de Jerusalén
EXTRAIDO DE MILIM
