Famosos y política, o las elecciones a la americana
Por Danielle Attelan para Guysen International News
Estrellas de la música, del deporte, del cine y de la televisión, las celebridades hollywoodienses se meten en la campaña electoral americana. De Tom Hanks a Robert De Niro pasando por Sylvester Stallone, cada uno fija sus preferencias para su "favorito". Pero en esta guerra de lentejuelas, Barack Obama, investido candidato demócrata en agosto de 2008, tomó una ventaja por anticipado sobre su competidor republicano John McCain … Hay que decir que las estrellas hollywoodienses son, en su inmensa mayoría, prodemócratas.
Will Smith, Jorge Clooney, Jennifer Aniston, Halle Berry, Morgan Freeman e incluso Edward Norton ya anunciaron que votarían por Barack Obama.
Todos los medios son buenos para apoyar a su favorito: la actriz Kirsten Dunst se pasea por las calles de Nueva York con una chapa "Obama 08" mientras que el comediante Ryan Phillippe optó por una pancarta como camiseta.
Los astros no se contentan con fijar su apoyo a los candidatos: se movilizan también para recolectar fondos con el fin de financiar campañas costosos, cuyos gastos alcanzaron récords en agosto de 2008. Barack Obama y Juan McCain dedicaron 94 millones de dólares a su campaña, según un informe publicado ayer.
La actriz y cantante Barbara Streisand dirigió el martes 16 de septiembre un banquete en Beverly Hills para recolectar fondo a favor de Barack Obama. El precio del billete de entrada ascendía a más de 30.000 dólares para la cena y la presentación de la cantante a 2500 dólares. Nueve millones de dólares han sido cosechados para el candidato demócrata, que financia totalmente su campaña presidencial con fondos privados, después de haber renunciado a aceptar el financiamiento público techado en 84 millones de dólares.
Entre los participantes de este banquete estaban presentes otras grandes estrellas hollywoodienses como Leonardo Di Caprio, Steven Spielberg, Will Ferrell, Jodie Foster y Jamie Lee Curtis.
John McCain aprovechó la ocasión para burlarse de la popularidad de la que goza su adversario. Jugando con la dualidad del lenguaje, el candidato republicano acusó el martes a su adversario de estar del lado más del people (celebridades) que del lado del people (pueblo).
El republicano no vaciló, por otra parte, en comparar la celebridad del candidato a la de París Hilton.
Si Barack Obama goza de un sostén casi unánime en Hollywood, todos los apoyos no son tan buenos para aceptar. Lo demuestra el caso de Lindsay Lohan cuya oferta de apoyo ha sido declinada por el equipo de la campaña de Barack Obama, invocando una incompatibilidad entre la imagen de la celebridad y la que desea transmitir la campaña.
Por su parte, John McCain cuanta con algunos apoyos hollywoodienses a su favor. El republicano puede enorgullecerse de haber recibido el apoyo de Sylvester Stallone.
¿La movilización hollywoodiense es verdaderamente susceptible de influir sobre los resultados de la votación del 4 de noviembre? Todo hace creer que “sí”, según un estudio de la universidad de Maryland.
Este estudio muestra que la reunión de Oprah Winfrey, la popular animadora de la televisión americana, tuvo una influencia decisiva en la victoria de Barack Obama en las primarios. Habría dado cerca de un millón de votos al candidato.
