Israel recuerda a sus 22.437 muertos en guerras y atentados terroristas
AJN/EFE.- Las conmemoración se cerrará con el encendido de una antorcha en el Monte Herzl, a última hora de la tarde, que dará paso al mismo tiempo al inicio de las celebraciones del 60 aniversario del nacimiento de Israel, conforme al calendario hebreo.
El ulular de las sirenas durante dos minutos recordó esta mañana en todo Israel a los 22.437 militares y civiles muertos en el campo de batalla y atentados terroristas desde 1860, cuando los judíos comenzaron a emigrar a Palestina.
Los peatones permanecieron parados en total y absoluto silencio y la mirada baja, mientras los coches se detuvieron y sus ocupantes salieron de los vehículos para mostrar en pié su respeto a los caídos en el "Día de la Memoria", que se celebra todos los años en la jornada anterior a la celebración del Día de la Independencia.
A primera hora de la tarde se llevarán a cabo ceremonias conmemorativas en los 43 cementerios militares del país, con la asistencia de diputados y miembros del Gobierno en representación del Estado.
El primer ministro, Ehud Olmert, acudirá a honrar a las víctimas al cementerio militar judío del Monte Herzl, en Jerusalén, mientras que el ministro de Defensa, participará en la ceremonia del de Kiryat Shaul, cerca de Tel Aviv.
Las conmemoración se cerrará con el encendido de una antorcha en el Monte Herzl, a última hora de la tarde, que dará paso al mismo tiempo al inicio de las celebraciones del 60 aniversario del nacimiento de Israel, conforme al calendario hebreo.
El recuerdo de los fallecidos se inició ayer en un acto ante el Muro de las Lamentaciones de Jerusalén en el que participó el presidente del Estado, Simón Peres.
Ante decenas de familiares de los fallecidos, Peres aseguró que "son vuestros hijos quienes han luchado por nuestro hogar" y mostró su esperanza por la llegada de "un mañana diferente, un mañana que traiga consigo la paz".
"Estamos preparados para pagar un alto precio por el día de la paz", dijo el jefe del Estado, quien añadió que "la esperanza por una paz real con todos nuestros vecinos fue y será el aspecto más importante de nuestras vidas en esta tierra empapada de sangre".
El Ejército y los organismos de seguridad israelíes se encuentran desde el martes de ayer en estado de alerta y los palestinos de Cisjordania y Gaza no pueden entrar en el territorio israelí, salvo en casos humanitarios.
Desde el nacimiento de Israel, en 1948, un total de 1.634 civiles han muerto en acciones terroristas, que han dejado más de 14.000 heridos, según datos ofrecidos por el Instituto de la Seguridad Social.
La mayor parte de los caídos israelíes a los que se recuerda hoy perdió la vida en las siete guerras con las naciones vecinas árabes que han tenido lugar desde esa fecha y las dos Intifadas palestinas contra la ocupación israelí de Cisjordania y Gaza.
Según la Media Luna Roja, 4.895 palestinos han muerto sólo durante la Segunda Intifada, iniciada en septiembre de 2000, sin que se conozcan datos globales sobre el número de muertos en esa comunidad por el conflicto con Israel, suscitado por la llegada de las primeras migraciones judías a Palestina.
De acuerdo con cálculos de observadores, ese número ascendería a decenas de miles.
Una soldado argentina pronunció un discurso por el Día de la Recordación en Israel
AJN.- Se trata de Daniela Dorfsman, una oficial del ejército que fue convocada para ser parte de la ceremonia en honor a sus pares fallecidos. El acto se realizó frente a una delegación de 250 latinos que se encuentran en Israel como parte del programa "Marcha por la Vida".
La sirena que sonó esta noche en Israel dio comienzo a las ceremonias alusivas al Día de la Recordación de los soldados caídos en las guerras, en diferentes ciudades del país.En el centro de la fuerza aérea de la ciudad de Hertzlia, una oficial argentina -que fue convocada por el cuerpo del ejercito que se encarga de las relaciones nacionales e internacionales de expansión cultural- pronunció un discurso alusivo frente a una delegación de 250 latinos que está culminando su programa "Marcha por la vida" en Israel.La ceremonia se inició con un minuto de silencio y el encendido de la tradicional vela de Izkor (recuerdo), siguió con la actuación de un coro de niños, el mensaje de familiares de caídos y el discurso de la soldado argentina, Daniela Dorfsman."Fue muy especial para mí que cuando terminó la ceremonia mucha gente se me acercara y me felicitara con un "kol hakavod" (todos los respetos, en hebreo) por mi labor en el servicio militar", contó Daniela en diálogo telefónico con la Agencia Judía de Noticias (AJN).Dorfsman llegó a Israel en el año 2003 y se alistó en el ejército israelí tres años más tarde. Luego de intensos entrenamientos adquirió el rango de oficial y, en ocasiones, hizo de guía a grupos latinos que querían profundizar sus conocimientos sobre la vida en el ejército.En declaraciones a esta agencia, Daniela dijo sentirse "muy emocionada y honrada" por haber sido elegida para contarle a la gente su experiencia. "Es un orgullo haber participado de un acto de estas características y ver los ojos de la gente al escuchar mis palabras, como los de mi mamá cuando se lo leí por primera vez".A continuación un fragmento de su discurso: "Pueden obligarte a usar un uniforme, incluso te pueden enseñar a vestirlo. Pueden obligarte a correr, a saltar, a arrastrarte por el piso. Pueden decirte cuándo, cómo y dónde dormir. Incluso cuándo, cómo y dónde despertarte (…) Pero nadie va a obligarte a que sientas orgullo por tu uniforme, entendiendo que es más que un pantalón y una camisa. O a disfrutar de la respiración acelerada al correr, sin rumbo alguno (…) Gracias a cada soldado, desde aquel que se sienta frente a una pantalla, hasta aquel que salta sobre una granada, salvando así a sus compañeros.Y es gracias a ellos también, que así como mañana celebraremos el día de la Independencia, lo haremos muchos años más."
Salvado por Schindler
AJN/AP- El superviviente del Holocausto Solomon Susskind, que fue salvado por Oskar Schindler, coloca flores en memoria de los que no tuvieron la misma fortuna, en el Museo Yad Vashem de Jerusalén.
MATTI FRIEDMAN
Israel cumple 60 años, pero en estos días los israelíes miran con nostalgia al pasado, especialmente las dificultades y alegrías de los primeros pasos del estado judío.
La televisión transmite fotos de archivo sobre las guerras del desierto y los días pioneros de las granjas colectivas, o kibbutz. Las radios transmiten sin cesar música retrospectiva y los últimos CD están interpretados por cantantes contemporáneos con las melodías favoritas de décadas pasadas.
Esta nostalgia por el pasado tiene lugar en momentos de cierto nerviosismo: los israelíes tienen motivos sobrados para enorgullecerse de su pasado pero no están seguros de lo que deparará el futuro.
"No es un secreto que en nuestro país, el presente no es fenomenal y el futuro asusta siempre, así que si se quiere sentirse bien, es más divertido mirar al pasado e ignorar los problemas", dijo Shaanan Streett, vocalista del grupo hip-hop israelí Hadag Nahash, que significa algo así como "pez culebra".
"Es como cuando la gente cumple 60 años", agregó. "Sus familiares le dan una fiesta y muestran diapositivas de cuando era joven y más apuesto".
Al cumplir el jueves su 60° cumpleaños, Israel nunca fue más rico ni poderoso. Ha capeado ataques que hubieran acabado con otras sociedades e incluso medró pese a ello.
Empero, los israelíes se sienten cada vez más disgustados con un sistema político sumido en el estancamiento y la corrupción y que parece carecer de líderes políticos que inspiren el respeto público. Además, hace unas décadas parecía inminente el fin del conflicto con sus vecinos árabes, aunque ahora parecer que se trató de un sueño ingenuo. Y tras perder sus austeros ideales socialistas de los primeros momentos, el país no puede concordar en una visión positiva que los sustituya.
"La nostalgia existe porque hoy sentimos un vacío, esa es la causa principal", comentó el abogado Eliad Shraga, un oficial en la reserva paracaidista que participó en la invasión israelí del Líbano en 1982 y en la guerra de Israel con las guerrillas de Jezbolá en territorio libanés hace dos años.
"Cuando veo lo que ocurre con mi primer ministro (Ehud Olmert), echo de menos a personas como David Ben-Gurion y Menachem Begin, al igual que Golda Meir, personas que vivieron en apartamentos de dos habitaciones y se las apañaron con muy pocos medios materiales", comentó Shraga. "Incluso si no estabas de acuerdo con ellos, sabías que eran personas de gran ética.
"Hoy, la mayoría de los israelíes no creen más en la paz. No fue así cuando el país cumplió 50 años", comentó el historiador Tom Segev.