REHEN REAL O PROVOCACION



Rehenes y presos, ¿en dónde estamos?
Por Guy Senbel para Guysen International News


En la ciudad de Lod, no muy lejos de una base militar, un soldado de Tzahal habría sido secuestrado este jueves, 13 de agosto, a primera hora de la tarde. Según el testimonio de una soldado, un militar habría sido subido a la fuerza a un coche, lo que inició una intensa busqueda por parte de la policía y el ejército. El rapto habría sido reivindicado por una organización palestina todavía desconocida, "el Ejército de Al-Qods ". Unas horas más tarde, el portavoz del ejército seguía sin confirmar si se había perdido un soldado o no.
Puede tratarse de un rehén real o simplemente de una provocación de mal gusto, en un país traumatizado por el terrorismo, el asunto del soldado secuestrado cerca del aeropuerto Ben Gurion, en el corazón mismo del país, reanima el espectro de la violencia en Israel y nos recuerda las fragilidades de la paz y de nuestra paz mental.Una realidad o un nuevo episodio de la fábula por la liberación de Guilad Shalit, se habla de que las negociaciones estarían bastante adelantadas y que un acuerdo sería inminente. ¿Todavía hay que creer en la fórmula de intercambio de presos? Guilad Shalit es un rehén, mientras que la inmensa mayoría de los palestinos detenidos en Israel son los socios comanditarios o los ejecutantes de atentados terroristas. Los presos palestinos reclamados por el Hamás no son presos políticos sino criminales que utilizan el terrorismo para a fines políticos. Salah Hamudi o Marwan Barghouti forman parte de estos terroristas. Encarcelando desde hace cuatro años por haber planificado asesinar al líder espiritual de Shas, el rabino Ovadia Yossef, Salah Hamoudi no recibió una "medida de clemencia" solicitada por el Presidente francés al Primer ministro israelí. Contrariamente a una falsa idea que comienza a difundirse por varios medios, Hamoudi no ha sido condenado por sus ideas, sino por tentativa de homicidio. Incluso fue encontrado culpable en un proceso judicial. La decisión de Netanyahu sigue las recomendaciones de la comisión de liberación del ministerio de Justicia, que subrayó en su informe que Salah Hamouri jamás expresó arrepentimiento por su intento de asesinato.En cuanto a Marwan Bargouthi, condenado a prisión de por vida por su implicación en varios atentados asesinos, la hipótesis de su liberación divide a la clase política israelí. He aquí a un líder palestino susceptible de crear “unión nacional palestina”, indispensable para la edificación de un Estado, pero encarcelado por cometer crimenes.Y luego nos encontramos con la otra violencia. La violencia psicológica, la que no derrama sangre sino que roe el alma de sus víctimas. Miedos interminables entre los habitantes del Néguev occidental. Sdérot, ciudad-búnker para los tristes niños de la ciudad. Los ensayos con los nuevos misiles por parte del Hamas, realizados esta semana, aterrorizan a un millón de personas en el Néguev y toda la franja de Gaza. Un informe reconfortante acusa por fin al Hamás de ser culpable de crimen de guerra, para haber utilizado a las poblaciones civiles como escudos humanos en el curso de la operación "Plomo Fundido". Una memoria espantosa nos lleva a la interminable espera de los rehenes del Jizballah, Eldad Reguev y Ehud Goldwasser, "liberados" el último verano en dos ataúdes negros. Espera interminable para ver la liberación de Guilad Shalit, que ninguna delegación del Comité Internacional de la Cruz Roja ha sido autorizada a encontrarse con él y comprobar su estado.Y no nos equivoquemos, aquí la cuestión de la liberación de los terroristas palestinos depende de la justicia penal israelí, mientras que la cuestión de la liberación de los rehenes depende del derecho humanitario. Trasciende los cruceros políticos, religiosos y nacionales. El último 30 de julio, en la ciudad de Beer Sheva, capital de Néguev, Noam Shalit recolectaba junto a un árabe israelí, el Sheij Salem al-Huzayel, firmas para una petición que pedía la liberación del joven soldado. Méir Lau, antiguo gran rabino de Israel, condujo este miércoles, 12 de agosto una oración en honor al soldado israelí delante de la "Pared occidental", el vestigio del templo de Jerusalén, para marcar el 23 aniversario de Guilad Shalit según el calendario hebreo. "Si fuesemos optimistas, no habríamos venido aquí para rogar", declaró Noam Shalit. Sabe, mejor que nadie, lo peor de lo peor, y espera lo peor.Esta tarde, pensamos en Guilad Shalit, rehén del Hamas en la Franja de Gaza, hace 1147 días.